En los últimos años el fenómeno de las Vías Ferratas se ha convertido en una actividad en auge en nuestras montañas.
Estos itinerarios deportivos que recorren paredes o macizos rocosos y que están equipados para facilitar la progresión mediante peldaños, clavijas, rampas, pasamanos, grapas, cable y en general todo tipo de dispositivos, para garantizar la seguridad de los usuarios.
Las vía ferratas por tanto, ponen al alcance de mucha gente, itinerarios que se encuentran a caballo entre el senderismo y la escalada.
Estos “caminos de hierro” que surgieron en las Dolomitas (Alpes italianos) y que se inventaron para equipar y garantizar el paso de los soldados alpinos por los pasos más difíciles de superar, se han convertido hoy en oportunidades de atracción turística y deportiva en nuestras montañas, equipándose cada vez más rincones de nuestra geografía para el disfrute de mucha gente.
Con un sencillo equipo, la progresión sobre vías ferratas dependerá de nuestras capacidades y de la dificultad de la Vía Ferrata y podrán ser afrontadas de forma autónoma o con la supervisión de un Guía de Montaña.
Para ello se hace cada vez más evidente conocer la graduación de las Vías Ferratas para conocer si están o no a nuestro alcance.
Para valorar la dificultad de una vía ferrata existen internacionalmente por lo menos cinco escalas diferentes pero las más utilizadas son la Hüsler y la escala francesa.
La nueva escala Hüsler, que recibe el nombre de su creador Eugen Eduard Hüsler. Hüsler ideó la cruz de Hüsler en la que se puntúan del 1 al 4 los cuatro aspectos más importantes que definen un itinerario: la fuerza requerida, la resistencia, la experiencia en montaña y los aspectos psicológicos. El resultado en la cruz de Hüsler nos indicará en que nivel de dificultad general colocamos la vía ferrata. Esta dificultad se mide con las siglas que van de K1 (Facil) a K6 (Extremadamente difícil)
La escala francesa, inspirada en el modo de graduación de las vías alpinas clásicas, dispone de 6 niveles diferentes de dificultad de F a ED en una escala de fácil a extremadamente difícil.
Grado F: Fácil
Grado PD: Poco Díficil
Grado AD: Algo Díficil
Grado D: Díficil
Grado MD: Muy Díficil
Grado ED: Extremadamente Díficil